Contenido Exclusivo!!

Impacto del Black Friday, en medio de la inflación y la incertidumbre económica

Especial para los seguidores de codigopostalrd.net

El Black Friday, el día después del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos (28 de noviembre en 2025), marca el inicio no oficial de la temporada de compras navideñas.

Originalmente acuñado en la década de 1960 por la policía de Filadelfia para describir el caos posterior al Día de Acción de Gracias, se ha convertido en un evento minorista global caracterizado por grandes descuentos y una alta actividad de consumo.

Si bien comenzó como un fenómeno en tiendas físicas, el auge de las compras en línea, acelerado por la pandemia de COVID-19, lo ha transformado en un evento de varios días o incluso meses, incluyendo extensiones como el Cyber ​​Monday y la Cyber ​​Week.

Esta sección explora sus impactos económicos, sociales y ambientales; sus consecuencias positivas y negativas; y las conclusiones clave extraídas de las tendencias recientes.

El Black Friday sirve como un barómetro de la confianza del consumidor y la salud económica general, y a menudo representa una parte significativa de las ventas minoristas anuales. En 2025, los datos preliminares muestran resultados dispares en medio de la inflación y la incertidumbre económica:

El gasto online en EE. UU. alcanzó los 10.800 millones de dólares durante el Black Friday de 2024 (se espera que en 2025 se alcance una cifra similar o ligeramente superior), lo que contribuyó a que las ventas navideñas se proyectaran en más de un billón de dólares a nivel mundial.

Esto genera empleos temporales en el comercio minorista, la logística y las cadenas de suministro, con sectores como la electrónica y la moda experimentando un aumento repentino.

Durante seis años consecutivos, más compradores han optado por las compras online que en tiendas físicas, siendo las compras móviles las que impulsaron el crecimiento (por ejemplo, las opciones de “compra ahora y paga después” aumentaron un 8,8 % en 2024). El tráfico de personas en las tiendas se mantiene estable, lo que refleja los hábitos pospandemia.

Adoptado en países como Canadá, Europa y otros países, influye en el comercio internacional, con eventos como las huelgas en los almacenes de Amazon en Alemania que ponen de relieve el impacto laboral.

Sin embargo, las promociones tempranas (que comienzan en septiembre u octubre) diluyen la urgencia del evento, lo que lleva a que los consumidores cautelosos cuestionen la autenticidad de la oferta.

Si bien el Black Friday genera entusiasmo, ha recibido críticas por promover comportamientos insostenibles.

Consumismo y presión: El marketing crea urgencia (p. ej., tácticas de escasez), lo que genera arrepentimiento en el comprador: el 47 % se siente presionado y el 48 % compra artículos innecesarios. En el pasado, se produjeron hechos violentos, incluyendo estampidas y la muerte de un trabajador en 2008.

El gasto excesivo a través del crédito o de la compra inmediata y el pago posterior agrava la presión financiera, con pérdidas anuales de 125 000 millones de dólares debido al fraude en línea y las devoluciones de cargos.

Las ventas prolongadas presionan a los trabajadores; en 2025 se produjeron huelgas en Zara en España y escaladas en Starbucks.

El 80 % de los artículos comprados se desechan tras un uso mínimo, lo que contribuye a los vertederos y a la generación de residuos electrónicos. La moda rápida y la electrónica amplifican la producción insostenible.

El aumento de los envíos y la producción aumenta las emisiones; Comprar temprano reduce el caos en días punta, pero distribuye el impacto a lo largo de las semanas.

La tensión en la cadena de suministro provoca una mayor contaminación; el agotamiento consumista está en aumento, y cada vez más personas optan por no participar.

En X, las conversaciones destacan la percepción en tiempo real: algunos señalan una menor expectación debido a las rebajas prolongadas, mientras que otros la vinculan con cambios culturales, como la disminución de las tendencias de la moda urbana.
Conclusiones y perspectivas futuras:

El Black Friday sigue siendo un motor del comercio minorista, pero está perdiendo su fuerza singular a medida que las ofertas se extienden durante todo el año, lo que provoca fatiga del consumidor y menores descuentos. Las conclusiones clave incluyen:

Con 186,9 millones de compradores estadounidenses previstos para 2025, el enfoque se centra en el valor sobre el volumen; categorías como el bienestar se disparan (crecimiento del 150-200 %) ante la decisión de no participar debido al consumo excesivo.

La creciente concienciación sobre los costos ambientales fomenta la compra responsable, apoyando los artículos locales o de segunda mano. Lecciones económicas: Subraya vulnerabilidades como la inflación y los aranceles, que podrían limitar futuras ofertas. Los minoristas deben priorizar la confianza (por ejemplo, una entrega fiable por encima del precio).

Si el agotamiento continúa, el Black Friday podría convertirse en una “temporada navideña” más amplia, con énfasis en las prácticas éticas para mantener la participación.

En última instancia, si bien genera ganancias a corto plazo, el Black Friday resalta la necesidad de un consumo equilibrado para mitigar los costos sociales y planetarios a largo plazo.

Latest

Newsletter

spot_img

Don't miss

spot_imgspot_img

Terminan conteo en Honduras, pero se espera el ganador oficial

Especial para los seguidores de codigopostalrd.net Antecedentes de las Elecciones Generales de Honduras de 2025Honduras celebró elecciones generales el 30 de noviembre de 2025 para...

DEJE SU RESPUESTA

Please enter your comment!
POr favor, entre su nombre