
Tras la derrota ante el FC Barcelona y el triunfo intersemanal en competición europea, que lo consolida en el top 8, el Real Betis visitó Vallecas con la intención de sumar tres puntos clave para mantenerse en la pelea por los puestos de Champions League.
El conjunto de Manuel Pellegrini llegaba al encuentro condicionado por varias bajas importantes. Amrabat y Abde se encuentran ausentes al estar concentrados con Marruecos para disputar la Copa África, mientras que Isco continúa lesionado, esperando su regreso la próxima semana. A pesar de ello, el Betis afrontaba el duelo con optimismo, respaldado por los buenos precedentes ante el Rayo Vallecano, entre los que destaca la histórica clasificación para la final de la Copa del Rey en 2022, tras eliminar al conjunto madrileño en semifinales.

Por su parte, el Rayo Vallecano está firmando un excelente inicio de temporada en competiciones europeas. Sin embargo, en LaLiga no está mostrando su mejor versión, pese a haber puntuado frente a varios de los grandes equipos de la clasificación, lo que lo sitúa en la zona media de la tabla. Por ello, los tres puntos en juego resultaban de vital importancia para evitar caer en la parte baja.
Inicio intenso, duro y trabado
La primera parte estuvo marcada desde el inicio por una intensidad muy alta y un ritmo exigente. Ambos equipos impusieron su estilo de juego y generaron llegadas, aunque sin acierto de cara a portería. Con el paso de los minutos, el Rayo Vallecano asumió mayor protagonismo y mostró una presencia más constante en campo rival. Aun así, destacó el sólido trabajo de las zagas defensivas de ambos conjuntos, que se mantuvieron firmes y evitaron que las aproximaciones se convirtieran en ocasiones claras de gol.
Las acciones a balón parado y los rechaces en zonas comprometidas generaron incertidumbre en ambas áreas y dieron lugar a una de las jugadas más polémicas de la primera mitad, en la que se reclamó una posible pena máxima tras un pistón de Aitor Ruibal a Álvaro García que finalmente Burgos Bengoetxea no señaló.
La dureza, la frialdad y la intensidad de cada uno de los duelos provocó interrupciones constantes y un clima de tensión creciente. La exigencia del juego derivó en varias acciones dolorosas y hasta dos lesiones que obligaron a ambos conjuntos a realizar sustituciones. La primera llegó por parte del equipo visitante: apenas a los cinco minutos de juego, Diego Llorente tuvo que abandonar el terreno de juego y fue sustituido por Marc Bartra tras sufrir molestias en el muslo izquierdo. La segunda lesión, también durante la primera mitad, fue la más impactante y dolorosa del encuentro, dejando una sensación fría en el ambiente de Vallecas. Tras una acción dura de Natan sobre De Frutos, el jugador del Rayo se vio obligado a abandonar el campo sin poder hacerlo por su propio pie, lo que reforzó la percepción de un partido extremadamente disputado y exigente que acabo con una pequeña tangana al final del primer tiempo.
El partido no definió a ninguno como ganador
La segunda mitad no bastó para definir a un ganador, el juego se apaciguó y el ritmo fue algo más lento, aunque sin perder en ningún momento la necesidad de ambos equipos de buscar los tres puntos. Con el paso de los minutos, el Rayo Vallecano fue ganando peso en el desarrollo del juego. Destacar la actuación de Isi Palazón durante el encuentro que dejó una de las ocasiones más claras de esta segunda mitad tras estrellar su trallazo desde fuera del área contra el poster de la portería de Álvaro Valles Por su parte, el Betis mostró más dificultades para sentirse cómodo con el balón y encadenar posesiones largas. Pese a ello, el conjunto sevillano resistió con solidez en tareas defensivas, con intervenciones clave dentro del área que evitaron remates claros del rival.
Finalmente, el choque se cerró sin goles, con un Betis impreciso y sin encontrar fluidez en su faceta ofensiva, frente a un Rayo Vallecano más insistente y dominante por momentos, aunque incapaz de traducir su empuje en goles. Un partido físico, trabado y maracado por cada duelo que se disputo en el terreno de juego que deja como protagonistas a los dos guardametas de cada escuadra, concediendo el MVP del partido a Álvaro Valles por su brillante actuacion que salva a su equipo de irse a casa sin puntuar
El empate a cero punto para cada equipo mantiene a ambos conjuntos en una posición similar en la tabla a la que ocupaban antes del inicio del encuentro. En el caso del cuadro de Heliópolis, suma un punto en un campo siempre difícil, cerrando así su etapa como visitante en este 2025, pese a que el año todavía no ha concluido para los verdiblancos. El Betis recibirá en la jornada 17 de LaLiga EA Sports al Getafe CF el próximo domingo a las 21:00 horas en el Estadio de La Cartuja.

