El partido de Liga entre el Sevilla y el Barcelona, disputado el 5 de octubre de 2025 en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, terminó con una impactante victoria por 4-1 para el Sevilla, propinándole al vigente campeón una inusual y humillante derrota.
Esta fue la primera derrota del Barcelona en Liga esta temporada y la más abultada desde la goleada por 4-0 que recibió ante el Real Madrid en 2024.
El Sevilla, bajo la nueva dirección de un exjugador del AEK Atenas, aprovechó las fallas defensivas y los contraataques del Barcelona, marcando su mayor victoria sobre el conjunto blaugrana en más de una década.
3′ (1-0): El Sevilla se adelantó con un penalti señalado por el VAR. Ronald Araújo cometió falta sobre Isaac Romero dentro del área, y Alexis Sánchez transformó con calma, marcando un ritmo frenético. 36′ (2-0): En una rápida contra, Roméo Vargas filtró un pase a Romero, quien remató a la red superando a Wojciech Szczęsny, dejando al descubierto la línea alta del Barcelona.
45+3′ (2-1): El Barcelona respondió justo antes del descanso. Un centro preciso de Pedri encontró a Marcus Rashford, cuya volea acrobática dio esperanzas a los visitantes y fue el momento culminante del partido.
90′ (3-1): José Ángel Carmona sentenció los puntos con una definición serena tras otra escapada del Sevilla, mientras el Barcelona atacaba con desesperación.
90+4′ (4-1): El suplente Akor Adams añadió brillo al rematar un rebote para sellar la goleada.
Robert Lewandowski desvió un penalti en la segunda parte —un posible salvavidas—, mientras que una tarjeta roja tardía a Peque Fernández del Sevilla (por una entrada sobre Eric García) fue anulada tras la revisión. Los porteros brillaron a ratos, con Odysseas Vlachodimos frenando a Rashford en múltiples ocasiones y Szczęsny realizando paradas tempranas.
Entre los jugadores más destacados se encuentran Rashford (7,5/10, gol y amenaza constante) con el Barcelona y Romero (8/10, gol y creador de caos) con el Sevilla. Lewandowski sufrió una pesadilla (4/10, penalti fallado), y el error de Araújo (5/10) fue la viva imagen de los problemas defensivos.

El Barcelona llegó al partido empatado a 19 puntos con el Madrid, pero ahora va dos puntos por detrás, perdiendo la oportunidad de remontar tras los tropiezos previos del Real Madrid. El Sevilla asciende a la zona media de la tabla (cerca del décimo puesto con 10 puntos), ampliando su racha invicta en 2025 a siete partidos.
Esta derrota agrava una semana brutal, tras la derrota por 2-1 en la Champions League ante el PSG y la decepción en el Balón de Oro (donde ningún jugador del Barça subió al podio). Esto intensifica el escrutinio sobre el sistema de presión alta de Hansi Flick, aunque después del partido atribuyó el fallo a “graves errores individuales” en lugar de a la táctica, prometiendo no hacer cambios antes del parón internacional.
El penalti fallado por Lewandowski (su tercero en 2025) plantea dudas sobre su estado de forma a sus 37 años, lo que podría erosionar la confianza en el ataque. Defensivamente, Araújo y los errores de la zaga ponen de manifiesto las vulnerabilidades ante el ritmo, lo que podría suponer una caída del título si no se abordan. Se espera rotación de la plantilla y un reajuste mental tras el parón, con jóvenes como Lamine Yamal necesitando un paso al frente.
Un impulso moral para los nervionenses, que no habían ganado en sus cinco anteriores contra el Barcelona. La irrupción de Romero (tres goles en cuatro partidos) y la veteranía de Sánchez apuntan a una gran promesa ofensiva bajo la dirección del entrenador Francisco Javier García Pimienta.
La victoria disipa los temores al descenso tras la mala racha de la temporada pasada, reforzando la confianza de la afición, como lo demuestra el tifo del Biris Norte en homenaje al icono antirracista Biri Biri y los cánticos a favor de Palestina. No hay lesiones importantes, pero intentarán aprovechar esta situación contra equipos de la zona baja de la tabla.
La polémica arbitral se agudiza, con la afición del Barcelona criticando el penalti de Araújo y una falta no pitada a Jules Koundé en el segundo gol del Sevilla, lo que alimenta el debate sobre el VAR en X.
Conclusiones y conclusiones
Esto no fue solo una sorpresa, sino una declaración contundente del Sevilla, que expuso la excesiva dependencia del Barcelona de la posesión (mantuvieron el 68%, pero crearon poco) contra rivales oportunistas.
La apuesta de Flick por una estrategia agresiva fracasó estrepitosamente, subrayando la necesidad de resiliencia defensiva en un calendario apretado. Para el Barça, la carrera por el título está lejos de terminar, pero dos puntos por detrás del Madrid exigen una respuesta inmediata; la historia demuestra que los tropiezos tempranos pueden arruinar las campañas (recordemos su tambaleo en 2023-24).
El Sevilla, por su parte, demuestra que la determinación en la zona media de la tabla puede humillar a los gigantes, lo que podría impulsar un avance hacia la mitad superior de la tabla.
Las reacciones de la afición en X captaron la conmoción: memes de la “semana de pesadilla del Barcelona”, burlas a los árbitros y las mejores jugadas del Sevilla triunfante, tendencia bajo el hashtag #SevillaBarça. Con el parón a la vuelta de la esquina, el Barcelona debe sanar sus fracturas; de no hacerlo, podría repetir su colapso de 2022. ¿La belleza del fútbol? Un partido cambia las narrativas de la noche a la mañana.

