NUEVA YORK — Los actuales campeones Boston Celtics se encuentran a un juego de la eliminación de los playoffs después de una derrota 121-113 ante los Knicks en el Juego 4 de las semifinales de la Conferencia Este, un resultado que puso a Nueva York al borde de su primera aparición en las finales de conferencia en 25 años .
Pero la desventaja de 3-1 en la serie no fue la razón por la que el vestuario visitante del Madison Square Garden permaneció en silencio durante media hora después del partido del lunes. Fue por la noticia potencialmente devastadora que aguardaba a la superestrella de los Celtics, Jayson Tatum , quien tuvo que ser retirado de la cancha al final del último cuarto tras sufrir una lesión sin contacto en la parte inferior de la pierna.
“En este momento, me preocupa Jayson”, dijo el pívot de los Celtics, Al Horford . “Eso es lo más importante para mí… Lo del partido, ya lo abordaremos. Pero solo espero que esté bien”.
Los Celtics acababan de perder la posesión del balón, y mientras Tatum se lanzaba hacia él, su pierna derecha cedió y cayó desplomado en la cancha con 2:58 por jugar. Después de que el alero de los Knicks, OG Anunoby, cogiera el balón suelto y corriera hacia el otro extremo para clavar, Tatum, que no intentó levantarse, pidió un tiempo muerto y se tapó la cara con una toalla, visiblemente dolorido, mientras se agarraba la pierna por encima del tobillo.
Finalmente lo ayudaron a ponerse de pie y lo sacaron de la cancha para colocarlo en una silla de ruedas.
El entrenador de los Celtics, Joe Mazzulla, dijo que Tatum se sometería a una resonancia magnética el martes, pero el equipo no publicó una declaración oficial sobre la lesión de Tatum y Mazzulla no tenía más novedades.
“No estoy seguro”, dijo el base de Boston, Jaylen Brown, cuando se le preguntó qué podría significar la lesión de Tatum para la franquicia de cara al futuro. “No tengo palabras ahora mismo”.
Para los Celtics, que llegaron al juego del lunes como los favoritos para emerger del Este a pesar de estar abajo 2-1 después de liderar cada uno de los primeros tres juegos de la serie por al menos 20 puntos, el desafío será encontrar una manera de reagruparse después de perder a su mejor jugador y líder por lo que seguramente será como mínimo el resto de esta serie.
Tatum había protagonizado un partido fabuloso antes de la lesión, anotando 42 puntos con 16 de 28 en tiros de campo, y había sido un ejemplo de resistencia a lo largo de sus ocho años de carrera en la NBA. Nunca se había perdido un partido de playoffs antes de que una lesión de muñeca le costara el segundo partido contra el Orlando Magic en la primera ronda. Los 10 partidos que se perdió durante la temporada regular fueron la mayor cantidad en su carrera.
El pívot de los Celtics, Kristaps Porzingis, dijo mientras estaba sentado en su casillero que él y sus compañeros de equipo no tienen más opción que seguir adelante y tratar de compensar la ausencia de Tatum mientras intentan avanzar a las finales de conferencia por cuarta temporada consecutiva.
“Estas cosas pasan”, dijo Porzingis. “Obviamente, todos lo sentimos por él en ese momento, pero simplemente tenemos que seguir adelante, tenemos que seguir jugando. Obviamente, todos nos dimos cuenta de lo que esto podría significar, pero, repito, esto es parte del deporte, es duro, y es difícil ver y aceptar la verdad.
“Pero es lo que es y tenemos que seguir adelante con lo que tenemos ahora”.
El doble golpe de los Celtics al sufrir una tercera derrota en la serie después de liderar por dos dígitos (Boston tenía una ventaja de 14 puntos antes de que Nueva York regresara en la segunda mitad) y la lesión de Tatum dejaron a muchos en la franquicia incrédulos.
Por otro lado, los Knicks enviaron sus mejores deseos a Tatum, con Karl-Anthony Towns , quien sufrió un serio desgarro en la pantorrilla hace un par de años que inicialmente parecía un posible desgarro en el tendón de Aquiles, indicando que dijo una oración para que el delantero All-Star regrese a la cancha lo más pronto posible.
“Ya he estado en una situación similar con mi pantorrilla”, dijo Towns, “así que me acerqué, respetando su espacio, y le recé a mi madre, le recé a Dios, para que lo protegiera y lo consolara. Sea lo que sea que tenga que superar, espero que sea un proceso rápido y sin dolor. Espero que podamos verlo de vuelta aquí pronto, con el talento de superestrella que es, jugando al máximo nivel”.
Los Celtics esperarán lo mismo, mientras buscan mantener viva su temporada en el Juego 5 el miércoles por la noche en Boston.
“Bueno, es muy preocupante”, dijo Horford. “Solo por el cariño que siento por él y lo que significa para nosotros, lo que significa para Boston. Es muy duro para nosotros”.
Y lo más importante, es una situación muy difícil para él ahora mismo. Ya veremos qué pasa. Es muy difícil para todo el grupo.
