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El partido Inglaterra vs. Andorra fue un clasificatorio europeo para la Copa Mundial de la FIFA 2026, disputado el 6 de septiembre de 2025 en Villa Park, Birmingham.
Inglaterra, bajo la dirección de Thomas Tuchel, se impuso por 2-0 a Andorra, un equipo modesto clasificado en el puesto 174 del mundo por la FIFA.
Este fue el partido inverso a su victoria anterior por 1-0 en Barcelona el 7 de junio de 2025, donde Harry Kane marcó el único gol. El encuentro fue de poca importancia para Inglaterra, que dominó la posesión, pero tuvo dificultades para romper la profunda defensa andorrana, lo que resultó en una actuación poco inspiradora a pesar del cómodo resultado.
Inglaterra se adelantó cuando un centro de Noni Madueke desde la derecha fue cabeceado inadvertidamente a su propia portería por el defensa andorrano Christian García. Minuto 67: Declan Rice amplió la ventaja con un cabezazo tras un preciso centro de Reece James, marcando su sexto gol internacional.
Alineación de Inglaterra (4-2-3-1): Jordan Pickford; Reece James, Marc Guehi, Daniel Burn, Myles Lewis-Skelly; Elliot Anderson, Declan Arroz; Noni Madueke, Eberechi Eze, Marcus Rashford; Harry Kane.
Alineación de Andorra (5-4-1): Iker Álvarez; Max Llovera, Christian García, Ian Olivera, Biel Borra, Moisés San Nicolás; Aron Rodrigo, Marc Vales, Pau Babot, Joan Cervós; Ricard Fernández.
El partido tuvo un impacto táctico o competitivo limitado debido a la gran disparidad en la calidad de los equipos: Inglaterra (ubicada en torno al 5.º puesto a nivel mundial) contra Andorra (174.º).
Sin embargo, sirvió como plataforma para la rotación de la plantilla y para poner a prueba a Tuchel. Positivo para Inglaterra: Elliot Anderson (Nottingham Forest) tuvo un debut impresionante en el centro del campo, recibiendo elogios de Tuchel por su energía, capacidad de decisión y capacidad para cubrir distancias.
El jugador de 22 años participó en la construcción del juego y casi marcó, lo que indica su posible inclusión contra rivales más duros como Serbia.
Noni Madueke (Chelsea) fue el jugador más destacado de Inglaterra, dando la asistencia para el primer gol con una exhibición vivaz y directa por la banda derecha. Su penetración y creatividad fueron puntos fuertes en un ataque por lo demás lento.
Reece James (Chelsea) contribuyó con la segunda asistencia, reforzando su importancia como lateral ofensivo.
El equipo faltó urgencia y creatividad durante gran parte del partido, con una posesión excesiva (alrededor del 70%) y pocas ocasiones claras. Tuchel comentó después del partido que “deberían haber marcado más” y desaprovechado oportunidades para acelerar el juego, haciéndose eco de las críticas del encuentro de junio.
Suplentes como Declan Rice aportaron energía, pero en general, la actuación fue descrita como “apagada y frívola” por los observadores, con la afición coreando cánticos ofensivos contra el primer ministro Keir Starmer en lugar de celebrar al equipo. La asistencia al Villa Park fue inferior al aforo, lo que refleja el escaso interés en estos partidos tan desiguales.
Una defensa firme mantuvo el marcador respetable, ampliando su racha sin goles en la fase de clasificación a 15 partidos (más de 1000 minutos).
El portero Iker Álvarez realizó varias paradas clave, incluyendo a Anderson y Eze, y fue posiblemente el jugador del partido. Sin embargo, su bloque bajo frustró más que amenazó, con solo raras contras (una bloqueada por Ezri Konsa).
El partido puso de relieve problemas más amplios en la programación del fútbol internacional, y los críticos lo calificaron de “irrelevante” y de un mal uso del parón internacional, desviando la atención de los encuentros más competitivos
Clasificación: Inglaterra lidera el Grupo K con 12 puntos en 4 partidos (GD +8, sin goles en contra), 5 puntos por encima de Serbia, segunda en la clasificación (que ha jugado 3 partidos).
La clasificación automática para el Mundial de 2026 (organizado en EE. UU., Canadá y México) está prácticamente asegurada para Inglaterra, ya que se mantiene invicta en 35 partidos de clasificación para el Mundial (27 victorias y 8 empates) desde 2009.
Andorra se mantiene colista con 0 puntos en 4 partidos (GD -8), con posibilidades de clasificarse para los playoffs, pero prácticamente eliminada, tras haber perdido todos los partidos de clasificación por un global de 11-0 esta campaña.
Esto extiende la racha invicta de Tuchel en partidos oficiales a 4 (todas victorias, todas con la portería a cero), pero su floja actuación intensifica el escrutinio antes de una prueba aún más dura contra Serbia en Belgrado el 10 de septiembre de 2025.
Tuchel hizo hincapié en la actitud y la concentración tras el partido, advirtiendo contra la complacencia: “Creamos mucho, pero no convertimos… fue una actuación sólida contra un bloque bajo, pero merecimos un 4-0 o un 5-0”. Las lesiones de John Stones y Adam Wharton obligaron a convocar a Djed Spence y Anderson, lo que podría reforzar la plantilla.
El debutante Anderson “superó la prueba”, según Tuchel, y podría jugar contra Serbia.
El gol de Rice le refuerza la confianza (5 participaciones en gol en 6 partidos desde la Eurocopa 2024).
No se reportaron lesiones importantes, lo que mantiene la plantilla ampliada para el choque contra Serbia. Con Andorra, el capitán Marc Vales alcanzó un hito histórico: 100 partidos internacionales, pero su racha sin victorias en 15 partidos de clasificación continúa, sin marcar goles desde junio de 2023.
La frustración de la afición se tradujo en cánticos políticos contra el primer ministro británico, Keir Starmer (“Keir Starmer es un p***”, al son de Seven Nation Army), lo que puso de manifiesto la división entre los aficionados. El traslado del partido a Villa Park (el primer partido de Inglaterra allí en 20 años) generó críticas dispares: algunos elogiaron el ambiente, pero otros destacaron las gradas medio vacías.
Inglaterra sumó tres puntos con diligencia en una victoria predecible pero poco inspiradora, lo que resaltó su superioridad sin mostrar el talento necesario para aspirar al Mundial.
El equipo de Tuchel mantuvo su solidez defensiva —cuatro porterías a cero en la fase de clasificación—, pero la incapacidad para desmantelar la defensa andorrana con eficacia plantea dudas sobre la capacidad de desmantelar equipos compactos, un problema recurrente desde la Eurocopa 2024.
Aspectos positivos como el debut de Anderson y el dinamismo de Madueke ofrecen esperanza, pero la actuación fue “execrable” y olvidable, como lo describió un experto, sirviendo más como un preámbulo que como una declaración.
Para Andorra, es otro esfuerzo valiente pero inútil; su organización se gana el respeto, pero sin una amenaza goleadora, siguen siendo eternos desvalidos.
En general, el encuentro ejemplifica las fallas del formato de clasificación para la Copa del Mundo: desajustes que reducen la emoción y aportan poco valor para el desarrollo.
La atención de Inglaterra ahora se centra en Serbia, donde una victoria podría prácticamente sellar la clasificación, pero Tuchel debe inculcar mayor crueldad para silenciar a los escépticos antes del torneo de 2026.

