La celebración del triunfo de Lina Luaces como Miss Universo Cuba 2025 tuvo lugar en el restaurante Call Me Cuban, ubicado en el hotel Cardozo en Miami Beach, tras su coronación el 8 de julio de 2025 en el Parque Milander de Hialeah, Florida.
Este evento marcó un hito personal y profesional para Lina, hija de la reconocida presentadora de El Gordo y La Flaca, Lili Estefan, y sobrina de los íconos musicales Emilio y Gloria Estefan.
La fiesta no solo celebró su victoria en el certamen, sino también su inclusión en la lista de Los 50 Más Bellos de People en Español. Asistieron familiares, amigos y otras figuras destacadas, en un ambiente cargado de orgullo y emoción.
Durante la celebración, Lina estuvo acompañada por su madre, quien ha sido su mayor apoyo, y otros seres queridos que enviaron mensajes, videos y flores para felicitarla.
Lili Estefan expresó su emoción en varias ocasiones, destacando el esfuerzo de su hija y el significado cultural de su logro. La joven modelo, de 22 años, lució radiante, consolidando su presencia como una figura carismática y decidida a representar a Cuba en el certamen internacional de Miss Universo, que se llevará a cabo el 21 de noviembre de 2025 en Tailandia.
La coronación de Lina Luaces generó una amplia cobertura en medios hispanos, como Univision, People en Español y ¡HOLA!, así como en redes sociales, donde se viralizaron videos de la reacción de Lili Estefan, quien gritó y lloró de emoción al ver a su hija coronada.
Sin embargo, el triunfo también desató controversias. Algunos cuestionaron la legitimidad de Lina para representar a Cuba por haber nacido en Estados Unidos y no hablar español con fluidez.
Estas críticas fueron respondidas por Lina, su madre y el director del certamen, Prince Julio César, quien defendió la autenticidad de su victoria y negó cualquier favoritismo relacionado con la fama de su familia.
Lina aprovechó la atención mediática para enviar un mensaje poderoso el 11 de julio de 2025, coincidiendo con el cuarto aniversario de las protestas del 11J en Cuba, respaldando la lucha por la libertad del pueblo cubano y reafirmando su conexión emocional con la isla.
La elección de Lina como Miss Universo Cuba 2025 marcó el regreso de Cuba al certamen internacional tras 57 años de ausencia, lo que resalta la importancia de su representación. Lina, quien eligió representar a Santiago de Cuba (lugar de nacimiento de su madre), expresó que ser cubana es “un símbolo de esperanza, fuerza, resiliencia y mucho trabajo duro”.
Su victoria también abrió un debate sobre la identidad de los cubanoamericanos, especialmente entre la juventud bicultural, inspirando a quienes se identifican con dos culturas. Lina destacó su compromiso con la comunidad cubana, tanto en la isla como en la diáspora, y su deseo de usar la plataforma para abrir puertas y educar.
Impacto Personal y Familiar:Para Lili Estefan, la coronación fue un momento de gran orgullo maternal, descrito como un “círculo completo” que conectó su propia trayectoria en el mundo del entretenimiento con el logro de su hija. Lili destacó los sacrificios de Lina, como su esfuerzo por mejorar su español y aprender más sobre la cultura cubana con su abuelo.
La relación entre madre e hija se fortaleció, con anécdotas divertidas sobre el intercambio de ropa y el apoyo incondicional de Lili, quien incluso mencionó a su exesposo, Lorenzo Luaces, al reflexionar sobre el triunfo de su hija.
La familia Estefan, incluyendo a Emilio y Gloria, celebró públicamente el logro, reforzando el apoyo familiar y la relevancia cultural del evento
La coronación de Lina Luaces como Miss Universo Cuba 2025 y su celebración en Miami Beach no solo fueron un logro personal, sino también un momento de orgullo para la comunidad cubanoamericana.
Su participación resalta la resiliencia y la identidad de la diáspora cubana, al tiempo que abre un diálogo sobre lo que significa ser cubano más allá del lugar de nacimiento.
A pesar de las críticas por su nacionalidad y dominio del español, Lina demostró fortaleza y autenticidad, apoyada por su familia y el director del certamen. Su preparación, guiada por figuras como Dayanara Torres y Clarissa Molina, y su enfoque en la autenticidad y la conexión emocional con el público, fueron clave para su victoria.
Lina se posiciona como un modelo a seguir para jóvenes biculturales, mostrando que la identidad cultural se lleva “en el alma” y que la educación y el compromiso pueden abrir puertas. Su mensaje de fe, resiliencia y apoyo a la libertad del pueblo cubano refuerza su rol como una representante con propósito.
La celebración consolidó la conexión entre Lina y Lili Estefan, mostrando una relación madre-hija llena de amor y complicidad. Para Lili, el triunfo de Lina fue una validación de su legado y un recordatorio de sus propios inicios en Miami, mientras que para Lina, representa una plataforma para crecer como modelo, influencer y defensora de su herencia cubana.
La fiesta de celebración de Lina Luaces como Miss Universo Cuba 2025 fue un evento cargado de emoción, orgullo y significado cultural, que trascendió lo personal para convertirse en un símbolo de identidad, resiliencia y esperanza para la comunidad cubana. Su impacto mediático y social sigue resonando, mientras Lina se prepara para representar a Cuba en el escenario internacional.
