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El espectáculo “Rubby Pérez Infinito” fue una gala artística celebrada el 11 de julio de 2025 en la Sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito en Santo Domingo, República Dominicana, para rendir tributo póstumo al legendario merenguero Rubby Pérez y a las víctimas de la tragedia del 8 de abril de 2025 en la discoteca Jet Set, donde fallecieron 236 personas, incluido Pérez, debido al colapso del techo.
El evento, organizado por los hermanos del artista, conmemoró los 50 años de carrera de “La voz más alta del merengue” y reunió a más de 70 artistas, incluyendo 27 intérpretes nacionales e internacionales, una orquesta de 36 músicos dirigida por el maestro Manuel Tejada, 10 bailarines y producción artística de Aidita Selman y Eliezer Pérez, con dirección televisiva de Alberto Zayas.
El concierto comenzó a las 8:49 p.m. con un video generado por inteligencia artificial de Rubby Pérez interpretando “O Sole Mío”, seguido de un minuto de aplausos en memoria de las víctimas del Jet Set.
Artistas como Milly Quezada, Frank Ceara, Alex Bueno, Los Hermanos Rosario, Miriam Cruz, Olga Tañón, Joseph Fonseca, Pavel Núñez, Martha Heredia, y las hijas de Rubby, Ana Beatriz y Zulinka Pérez, interpretaron éxitos emblemáticos como “No voy a llorar”, “Pato robao”, “El africano”, “Para que no me olvides”, “Sobreviviré”, “Préstame a mi padre”, “Color de rosa”, “Hipocresía”, “Tonto Corazón”, “Volveré”, y “Hazme olvidarla”. M
Momentos destacados incluyeron la emotiva interpretación de Ana Beatriz y Jandy Ventura de “Préstame a mi padre”, y Zulinka con Miguel Báez cantando “Color de rosa”, la última canción que Rubby interpretó antes de la tragedia.
El homenaje tuvo un impacto cultural y emocional profundo en la comunidad dominicana y latinoamericana. Fue un evento histórico que no solo celebró el legado musical de Rubby Pérez, sino que también sirvió como un espacio de catarsis colectiva tras la tragedia del Jet Set.
La participación de artistas de renombre y la presencia de las hijas de Rubby reforzaron el sentido de unidad y respeto hacia su figura, consolidando su estatus como ícono del merengue.
La producción de alta calidad, con una orquesta numerosa y una narrativa escénica que recorrió los 50 años de carrera de Pérez, garantizó una experiencia estética y emocional memorable, grabada para su difusión en televisión abierta como parte de la memoria audiovisual dominicana.
El evento generó una gran expectativa en redes sociales, con videos de ensayos que aumentaron la emoción previa, y fue descrito como un espectáculo cargado de nostalgia, alegría y lágrimas.
La participación de artistas internacionales como Olga Tañón y Amaury Gutiérrez destacó la influencia de Rubby más allá de las fronteras dominicanas, reforzando su impacto en la música tropical y la identidad latina.
Además, la inclusión de familiares como Ana Beatriz y Zulinka añadió un componente personal que conmovió al público, especialmente en momentos como la interpretación de “Préstame a mi padre”, que evocó la pérdida de Rubby y Johnny Ventura.
“Rubby Pérez Infinito” fue más que un concierto; fue una celebración de vida, música y resiliencia que honró a uno de los mayores exponentes del merengue dominicano y a las víctimas de una tragedia nacional.
El evento demostró el poder de la música para sanar y unir, al tiempo que preservó el legado de Rubby Pérez como un artista cuya voz y carisma dejaron una huella imborrable.
La participación masiva de artistas, la dirección musical de Manuel Tejada y la producción profesional aseguraron un homenaje digno de su trayectoria, mientras que la transmisión televisiva garantizará que su legado perdure.
Sin embargo, la ausencia inicial confirmada de Zulinka, quien luego decidió participar tras aclarar rumores sobre motivos económicos, refleja las complejidades emocionales y logísticas de organizar un evento de esta magnitud.
En conclusión, el homenaje no solo celebró los 50 años de carrera de Rubby Pérez, sino que también reafirmó su lugar como un tesoro cultural dominicano, dejando un impacto duradero en la memoria colectiva.
