
El árbitro de la final de la Copa del Rey, Ricardo de Burgos Bengoetxea, se emocionó este viernes al hablar de la presión a la que se han enfrentado los árbitros esta temporada desde Real Madrid TV.
El Madrid se enfrentará a su rival Barcelona el sábado en la final de la Copa de España en Sevilla, y esta semana el canal de televisión del club publicó un vídeo criticando al árbitro, algo que han hecho con varios árbitros a lo largo de la temporada.
Los Blancos también publicaron una carta abierta en febrero, afirmando que el arbitraje español estaba “amañado” y “completamente desacreditado”.
“Cuando un hijo tuyo va al colegio y otros niños llaman a su padre ‘ladrón’, y llega a casa llorando, eso está totalmente mal”, afirmó De Burgos Bengoetxea en rueda de prensa.
“Lo que intento hacer es educar a mi hijo, enseñarle que su padre es honesto, sobre todo honesto, y capaz de equivocarse, como cualquier deportista”, continuó, visiblemente emocionado.
“Esto es muy duro… pero el día que deje este trabajo, quiero que mi hijo se sienta orgulloso de quién es su padre y de lo que significa el arbitraje: nos ha enseñado muchos valores”.
Enjugándose las lágrimas, el jugador de 39 años pidió una reflexión más profunda sobre el tema del abuso arbitral.
“No está bien lo que estamos viviendo muchos de nosotros, no solo en el fútbol profesional, sino también a nivel de base”, añadió.
“Todos deberíamos reflexionar sobre hacia dónde vamos y qué queremos del deporte y del fútbol”.
Pablo González Fuertes, árbitro encargado del VAR para la final, sugirió que los árbitros podrían tomar más medidas sobre las transmisiones de Real Madrid TV en las próximas semanas.
“No tengan duda: tendremos que empezar a tomar medidas mucho más serias que las que estamos tomando actualmente”, afirmó González Fuertes.
No seguiremos tolerando lo que está sucediendo. Pronto tendrás noticias nuestras.
“Vamos a hacer historia porque ya no vamos a soportar lo que hemos estado soportando”.
AFP

